Broccolino: un clásico vigente para el turista en el downtown porteño

El microcentro de Buenos Aires supo ser, históricamente, el epicentro receptivo de los visitantes que llegan a la ciudad desde todas partes del mundo. La pandemia arrasó con la vida cosmopolita y frenética característica del bajo porteño, pero dos años después comenzó a recuperar su ritmo y el regreso del turista fue clave en este resurgimiento.

Sólo algunos negocios pudieron mantenerse o volver tras esta crisis épica. Uno de ellos fue Broccolino Ristorante, quien desde su apertura en 1985, ha sido un lugar recomendado por hoteles y agencias concentradas en la zona.

 

 

 “Siempre recibimos mucho extranjero. Por la zona y por las recomendaciones. Hoy están viniendo muchísimos uruguayos los fines de semana. También hay turistas asiáticos y de todos los países fronterizos. Brasil siempre vino a Broccolino muchísimo, todos los operadores turísticos nos recomiendan directamente. y en una oportunidad hasta nos han propuesto abrir una sucursal en San Pablo y Río de Janeiro.. Hay muy pocos europeos comparado con lo que era antes de la pandemia.”, comenta Alejandro Ballabeni dueño e hijo de Luciana, fundadora y alma mater del local.

 

 

Por otra parte, el contexto económico y cambiario que favorece esta afluencia de extranjeros, también se ve reflejado en el consumo durante la estadía. En Broccolino pueden disfrutar de una comida de cocina casera, con servicio de mesa y un plato de elaboración, por un ticket promedio de 14 dólares. (como referencia, un combo BigMac cuesta 5 dólares en Argentina)

 

 

Considerado uno de los mejores restaurantes de comida italiana de la ciudad, siempre supo satisfacer el paladar de los visitantes tanto por la calidad de su comida como por la calidez con la que reciben a sus comensales.

Broccolino volvió a abrir sus puertas junto al mismo fiel equipo de cocineros y mozos: “Abrí después de la pandemia para no anquilosarme y porque pensaba en la vuelta de  los turistas. Broccolino es una empresa de servicios, no un restaurante solamente. Estamos abiertos todos los días mediodía y noche, quienes nos conocen saben que aquí siempre van a encontrar un plato de spaghettis recién hechos como en casa”, dice orgulloso Ballabeni.

 

 

Afuera cambió todo, pero adentro del restaurante se mantienen el saludo de bienvenida, el pancito recién salido del horno y la sensación incomparable de sentirse como en casa, aún estando lejos.

 

 

www.broccolino.com.ar  | IG: @broccolino_ristorante

 


 

 

 

 

 

 

Fotos tomadas por Yany Cantoli con el Moto G52 de Motorola https://www.motorola.com.ar/